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La saga sigue su nivel y no defrauda, ya solo nos queda una historia y estoy segura de que estará también a la altura. En esta ocasión era el turno de Violet, la hermana de Scarlett y Max, una chica que tras un gran palo se centra en vivir el día a día sin pensar en el futuro y así aprovecharlo al máximo. Un poco perdida en la vida y que no espera que Londres le pueda sentar tan bien. Gracias a Darcy se van a facilitar un poco las cosas, y ya conocimos a este secundario en el libro anterior, pero en este ha ganado más peso y tengo ganas de conocer su historia. Bien, Alexander también me ha parecido un personaje increíble y muy bien definido. La conexión con Violet es desde el inicio muy palpable, y cuando se va afianzando su relación vas viendo lo sana que es porque ambos sacan el mejor lado del otro y se complementan de una manera brutal. Si que es cierto que esperaba que Alexander solucionará el tema del pasado de Violet (no quiero hacer spoilers), pero creo que el desenlace final está muy altura y demuestra mucho. Es una novela a dos voces que te atrapa desde el inicio y que bien se puede devorar. |
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