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Decidí leer este libro tras haber visto la primera temporada de la serie que tanto me gustó y gracias a mi creciente interés por las novelas de fantasía. En la novela tenemos como protagonista a Alina, una joven huérfana de y que lo único que le queda en el mundo es su mejor amigo Mal. Tanto Mal como Alina son destinados a cruzar lo que se conoce como “La Sombra”, una red oscura que divide al país en dos partes y repleta de monstruos capaces de devorar a cualquiera que intente cruzar su territorio. En “La Sombra”, Mal se encontrará en peligro de muerte por estos despiadados monstruos, lo que provocará una luz jamás vista en Alina que salvará la vida de Mal. Estos sucesos cambiarán radicalmente la vida de Alina convirtiéndola tanto en el arma perfecta de salvación como la de destrucción. La prosa de la novela es bastante amena y sencilla provocando un enganche del lector desde la primera página. Me gusta como Leigh ha ido construyendo los personajes y los cambios que van teniendo según sus experiencias. La serie, tiene pequeños cambios con respecto a la novela y por lo que creo, mezcla tanto puntos del primer libro como del segundo ya que hay personajes muy interesantes de la serie que todavía no han aparecido en este libro. A pesar de que conocía el final y no he tenido esa acuciante necesidad de saber como acaba (consecuencias de ya saberlo), Leigh ha conseguido provocarme la tensión y la necesidad de tener que acabarme el libro. Se trata de una buena novela repleta de fantasía con un mundo muy interesante y bien creado además de poseer este toque de romanticismo que tanto nos gusta en este tipo de novelas. Ya tengo ganas de seguir con el próximo. |
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