Flores de Violet Pavilion 1: 1812

En 1812, en el condado de Derbyshire, Inglaterra, la mansión familiar Violet Pavilion está lista para la llegada de la familia Stapleton, que van a pasar allí los meses de verano como cada año. Lily y Rose son dos hermanas, de 19 y 15 años respectivamente, que se emocionan cuando llega esta época, pues en Violet Pavilion disfrutan de las maravillas del campo y la naturaleza, pero también de las visitas y las fiestas junto con las familias más importantes de la zona. Precisamente ese verano será la presentación en sociedad de Rose, la pequeña de los Stapleton, como mandan las costumbres.

Rose está muy ilusionada con este hecho, así como con la idea de que un caballero de buena familia la corteje y la pida en matrimonio. Por el contrario, Lily no sigue los ideales propios de la mujer en esa época; a sus 19 años no piensa ni por asomo en casarse, y mucho menos, si es un matrimonio de conveniencia e intereses económicos y de poder. Pero el verano da para mucho, y ambas hermanas verán sus sentimientos sacudidos, de una u otra forma.

A Violet Pavilion van a llegar conocidos de la familia y amigas de Lily y Rose a pasar una temporada. También llegarán los señores Berry y el señor Loughty, así como los Myers, a propiedades vecinas, por lo que compartirán muchos momentos con la familia Stapleton. Lily se verá envuelta en varios de estos momentos que no sabrá cómo gestionar y todas sus convicciones se tambalearán.

Como base de toda la historia encontramos un personaje muy especial: la gran Jane Austen. Los Stapleton regalan a sus hijas la novela Sentido y Sensibilidad, que Lily devora rápidamente y se ve muy identificada con una de las protagonistas, dos hermanas que mucho tienen en común con ella y con Rose. A lo largo de toda la novela los distintos personajes van leyendo Sentido y Sensibilidad y esta tiene un gran influjo en ellos, además de lo excepcional de que una novela escrita por una mujer, que firma bajo el pseudónimo «La Dama», tenga tanto éxito y repercusión en una época y una sociedad en la que la figura de la mujer se limitaba a tener que esperar que un hombre quisiera casarse con ella y asegurarle un futuro.

Flores de Violet Pavilion es una novela que me ha enganchado de tal manera que la he leído en un día. Este año me había propuesto leer algún clásico y al leer esta novela mis ganas han aumentado de forma exagerada. La autora ha plasmado perfectamente la sociedad de la época, tanto en la narración, los diálogos, la descripción de situaciones y vestimentas y, sobre todo, los sentimientos, esos que estaban prohibidos si la otra persona no pertenecía a la misma clase social, pero que eran tan intensos que dolían.

En definitiva, me ha encantado y no puedo hacer más que recomendarla, especialmente a todo el que le guste Jane Austen y los clásicos, pero si no sois lectores habituales de este tipo de literatura os lo recomiendo igual, ya que está escrito de una forma elegante y sencilla a la vez, y cada final de capítulo te incita a seguir leyendo el siguiente. No dejéis pasar la oportunidad de leerlo, no os va a defraudar.