Ha sido un libro que he devorado, la verdad. En él he encontrado el cliché del "camino" y es de mis favoritos, ¡me engancha un montón! Más que los personajes, creo que en este caso voy a destacar más la reflexión y la enseñanza que nos deja: Pensar, plantearnos...¿por qué?, ¿Lo que damos por sentado es lo correcto?... Y es que poco a poco, vamos descubriendo cómo las experiencias y vivencias propias van cambiando a nuestro protagonista y la concepción que tiene del mundo... No todo es lo que parece. Esta historia, al ser un middle grade con un toque de dulzura e inocencia, os la voy a recomendar también para los "peques" de la casa. ¿Os animáis a reflexionar con ellos? |