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“La campana nazi” nos presenta una nueva aventura de nuestro querido investigador Halcón. A pesar de ser libros que se pueden leer de manera completamente independiente, mi recomendación es leer primero el de “La torre Tesla”. Es cierto que, lo que es la resolución del caso en sí, no tiene relación alguna con el libro anterior, pero si ya conoces a los personajes percibes pequeños detalles que, de lo contrario, se te podrían pasar por alto. Se nota algo de evolución en su actitud y se ven, también, progresos o cambios en los vínculos que los unen. Y aunque Halcón, nuestro protagonista, sigue con su peculiar sentido del humor y su siempre presente sarcasmo, aquello que lo convierte en un personaje único y de lo más carismático, sí vemos en él sutiles cambios; rastros de todo lo vivido en el caso anterior. El libro mantiene la misma estructura que veíamos en el caso anterior: se nos presenta la trama en formato diario de investigación de nuestro protagonista, lo que implica que nos encontremos ante una narración en primera persona, con capítulos cortos y dinámicos y sin detenerse demasiado en detalles que poco aportan a la resolución del conflicto principal. En esta ocasión, la historia se aleja un poco del thriller-científico que veíamos en el libro anterior y, por la casuística de este nuevo caso, nos adentramos en un thriller más fantástico y con cierto deje de novela de aventuras. Algo que, sumado al fuerte vínculo de este caso con la música, ha hecho que este segundo libro me gustara más que el anterior. Un thriller ligero, de lectura rápida y sencilla que, además, gracias a su parte de base histórica, nos desvela interesantes conocimientos estrechamente relacionados con el caso que, una vez más, queda completamente cerrado. |
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