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3-3,5/5 En "el ministerio de la verdad" nos encontramos con una novela de actualidad, en la que nos dibuja un futuro año 2030 en el que la tecnología estará enormemente desarrollada, tanto que prácticamente toda la población vive inmersa en sus tablets, móviles y ordenadores, los libros prácticamente han desaparecido y únicamente se venden las noticias sensacionalistas, realmente nadie quiere conocer la verdad. En este escenario se encuentra el denominado Ministerio de la verdad, con sus grises funcionarios, encargado de desmentir los bulos que circulan en internet. Sin embargo, la hija de un antiguo periodista comienza a averiguar secretos oscuros de este ministerio y hará todo lo posible para que salgan a la luz. Tengo que reconocer que, ante todo, "El ministerio de la verdad" ha sido una lectura entretenida y fácil de leer. En cuanto a la trama en sí, han habido ocasiones en las que me ha parecido que la novela tenía un trasfondo y una crítica social muy interesante y, en otras ocasiones me ha parecido que el autor se pasaba de elitista. Me explico, me parece muy interesante cómo dibuja este futuro en el que la inteligencia artificial y el análisis de datos se ha perfeccionado hasta el punto de poder controlar a la sociedad, o como la sociedad cada vez prefiere acceder a noticias más sensacionalistas y que le entretengan en vez de leer artículos más complejos. Es enfoque me ha parecido muy interesante. Pero, por otro lado, me ha chirriado y me ha dado la impresión de elitista cuando el protagonista relega de los jóvenes de dicha sociedad porque prefieren "los videojuegos clásicos" y no "los libros clásicos", por ejemplo, dando a entender que la literatura se encuentra muy por encima de los videojuegos cuando son dos formas de entretenimiento totalmente válidas. En cuanto al desarrollo del libro en sí, han habido ocasiones un poco increíbles a lo largo del libro pero en general me ha entretenido. No me ha parecido la novela del siglo, ni mucho menos, pero cumple su función. Eso sí, el final me ha parecido muy mejorable, me ha dado la impresión de que el autor no sabía cómo acabar la novela y ha optado por dicho final. |
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