Libro escrito en 1955. El primer tercio del libro es algo tedioso, pero pasado esto se convierte en un torrente de imaginación, emoción, intriga, tensión... Ha sido una sorpresa leer a Asimov con esta historia; sólo conocía sus historias de robots. Claramente Asimov no es un portento de literatura de calidad, pero sus mensajes son claros y directos, lectura rápida y cautivadora, con una imaginación desbordante que recomiendo a todo el mundo |