Este es el primer libro de Silvia Argüelles y nos presenta a Ginebra, inspectora de homicidios y a su unidad. Este equipo tiene que investigar una serie de asesinatos. Las víctimas están marcadas por el asesino, pero… ¿qué es lo que busca? Son mujeres normales, con sus vidas. ¿Tienen alguna marca que les hace diferentes? Silvia teje una novela con una investigación que se va complicando y muchas variables a tener en cuenta. El libro está bien escrito, aunque hay alguna trama que, en mi opinión, no era necesaria. Las piezas del rompecabezas iban encajando. También, hay algún elemento que me generó curiosidad y muchas dudas jajaja. Este ha sido un libro viajero y me lo he pasado bien, me distrajo y me atrapó. |