Una semana de vacaciones

Novela corta perturbadora a medida que progresa la narración. El protagonista es manipulador, calculador y, bajo la falsa pretension del respeto a los deseos de la mujer, siempre hace prevalecer sus necesidades. Si bien menciona a su esposa y a sus amantes universitarias, queda claro que sus gustos se desvían, ahora está con una menor de edad o eso se da a entender. La novela es perturbadora porque hay varias claves que indican que la chica es menor: es virgen e incluso no sabe respirar cuando él la besa. Además de su insistencia en que lo llame "papá ", y el parecido de la chica con su propia hija. Él dice que no desea a su hija pero sus actos demuestran deseos reprimidos que empiezan a aflorar. La chica no tiene dinero, otro indicio de su minoría. El personaje masculino pretende ser comprensivo pero termina mostrando su esencia totalmente despreciable.