Lo que permanece

De primeras la historia a mí me llamó mucho la atención, ya que parece que estamos ante un pasado y un presente que se unen a través de los sueños. Este tipo de libros por lo general me encantan, y en este caso la premisa no podía ser más atractiva. Así que podemos decir que la historia tiene dos narraciones: la del presente y la del pasado, que se van mezclando. Es cierto que la del pasado de primeras la vamos conociendo a través de los sueños que tienen nuestros protagonistas y que nos van contando, aunque en cierto momento se dedica un capítulo a contarnos más del pasado.
Este punto me ha parecido genial y creo que la forma de narrarlo ha sido muy acertada, no lo voy a negar. El tema de los sueños y las reencarnaciones y vidas pasadas me fascina como digo.
Los dos personajes del presente parecen terminar, en cierto modo, lo que empezaron los dos del pasado, centrándose sobre todo en sus sentimientos. Y que esto no os lleve a engaño, aunque tenemos toques de romance no sé si diría que es una novela romántica como tal o, al menos, no lo es al uso, lo que también me ha encantado:
Para mí el problema ha venido con una de las tramas de uno de los personajes secundarios que, de pronto, cobra gran protagonismo, pero de cara al final, lo que hace que se solucione de manera un poco rápida y que quede un poco confuso en la historia.
La autora deja una nota al final hablando de la juventud que se involucra en los problemas de la sociedad y que se muestra combativa, y en este aspecto sí que me ha gustado ver personajes que tienen unos fuertes ideales y que se preocupan por el mundo en el que viven, pero sí que quizá me hubiera gustado verlo más desde el principio. Sí que se nos dice que uno de los personajes es un activo importante en la lucha contra el cambio climático, aunque no se nos muestra.
Entonces, en este punto, creo que se dejan demasiados frentes abiertos o puntos que se podían haber desarrollado más desde el principio o haberles dado más importancia.
Creo que esto se me ha quedado corto.

Los personajes
Otra cosa que no me ha gustado del todo han sido los personajes. A su manera todos son peculiares y no he llegado a empatizar con ninguno de ellos. No son personajes en los que haya visto una gran evolución y a los que haya podido coger cariño.
Rafael es un joven español que está de Erasmus en Francia, trabaja para poder pagarse su estancia en la ciudad, ya que sus padres atraviesan un mal momento económico y parece que tiene la cabeza llena de pájaros. Es un poco despistado, atolondrado, pero parece buena persona.
Como contrapunto tenemos a Éttiene, un joven que se involucra en las luchas sociales y que tiene una vida más complicada de lo que podríamos pensar. Lo que más me ha gustado de él es que se comenta que es autista, pero se trata el tema con una naturalidad que pocas veces he visto en un libro, así que esto es un gran punto a favor.
Aparecen muchos personajes secundarios, más bien los círculos cercanos de ambos chicos. de los amigos no tengo mucho que comentar, algunos tienen más relevancia que otros y todos cumplen su papel, así que no creo que sobren ni que estén de más, además sí que están bien caracterizados.
Luego están las familias de los dos jóvenes. Y ninguna me ha caído bien, en especial las madres, que en ambos casos me han parecido insufribles.

El estilo
A pesar de todo, la forma de narrar de Andrea me ha gustado mucho. Es la primera vez que la leo y no creo que sea la última, porque aunque la historia que nos ha presentado no me ha convencido, la forma en la que lo ha hecho sí.
Es una narración sencilla y rápida, ágil, con capítulos cortos (es verdad que en algunos casos demasiado, pero esto es más gusto personal que otra cosa) y alternos, ya que a veces teníamos a Rafael y a veces a Étienne. A pesar de que los chicos no me han terminado de convencer lo que no puedo negar es que cada uno tenía su propia voz, así que era fácil saber quién estaba narrando en cada momento, cosa que es de agradecer, ya que en este tipo de historias en muchas ocasiones las voces se confunden.

Conclusión
A pesar de que la historia se me ha quedado corta, el libro lo leí en una tarde, por lo que si sabéis a lo que os estáis enfrentando puede ser una lectura perfecta para cambiar un poco el chip o leer algo diferente, ya que creo que pocas veces he leído una historia como esta. El estilo de Andrea seguramente os guste y yo, sin duda alguna, repetiré con la autora.
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