Tristes sombras

12 cuentos divididos en dos secciones y dos lugares distintos en donde se desarrollan, eso fue todo lo que se necesitó para hacerte sentir cientos de emociones distintas.

No sé qué fue lo que más me gustó, el hecho de que relatara historias de un México oscuro y enfermo, o la sensación de estar leyendo historias de terror que en realidad no lo son. Llegas a sentirte horrorizado más que cuando ves películas de terror, porque no hay nada que dé más miedo que ver los horrores que las personas pueden cometer, actos tan bárbaros que dejan pensantivos sobre si nosotros somos los verdaderos monstruos.

¿Lo que logra que esa sensación de terror sea tan vívida y escalofriante? Es pensar que todas esas desgracias y relatos de locos no tan locos tienen algo de verdad.

A veces llegué a perderme un poco entre relatos, y es que cada uno de estos cuentos pueden leerse de manera independiente pero al mismo tiempo tienen algunos pequeños detalles que los conectan entre sí y te hacen sentir emocionado al conectar esos hilos sueltos.

En general, es un libro espléndido que me sorprendió de sobre manera. Y cumple perfectamente al describir lo que son todos y cada uno de estos personajes, simples y deprimentes tristes sombras, sombras que alguna vez fueron personas condenadas por sus propios demonios, o personas inocentes que pecaron de ignorancia.