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Un libro que atrapa, con una historia dura e inhumana, vista desde la perspectiva de un niño de 9 años, Michele, que pierde la inocencia y la confianza en los adultos.Tiene ese punto ambiguo con el comportamiento de los padres del protagonista y la percepción que el niño tiene sobre ellos, eso tan difícil de entender, tan ambiguo, como es la maldad y como nadie es malo siempre y con todo el mundo.Como punto a favor es que la historia se cuenta en menos de 200 páginas, con un estilo sobrio y sin alardes descriptivos ni escenas que alarguen la historia. Son apenas unos días de la vida del protagonista que cambiarán su vida y la percepción sobre los demás.En esa linea sobria es el final, quizás sorprendente para algunos aunque coherente con la forma en que está narrada la historia.El punto negativo que le encuentro es que la historia está narrada por el protagonista ya adulto, buen truco narrativo para simplificar la escritura y comprensión de los hechos, pero esto hace que la historia quede algo coja sin ningún elemento que relacione el Michele adulto con el de 9 años ni el porque nos está contando su historia.El ritmo del libro es muy bueno, con un último tercio en el que no se puede dejar de leer y con un protagonista heroico que emociona. Muy buena lectura.
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