Matar al padre

Como casi todos los de ella nos encontramos con una historia cortita y peculiar que a veces roza lo surrealista.
A mí me gusta leer a esta autora a ciegas, voy a la estantería de la biblioteca en la que están sus libros y simplemente agarro uno de los que me faltan por leer y hasta ahora solamente me ha defraudado uno.
Me gustan sus libros no sólo porque nunca sé lo que me van a contar si no también porque me resultan muy útiles cuando llevo temporadas con cosas más intensas o libros de autoficcion, cuando no sé qué leer y siento que me voy a atascar un poquito, son una chispa de locura y frescor.