Es justo lo que esperaba y necesitaba. Vaya dos personajes son Isabel y Sergio. Me ha gustado mucho conocer sus infancias y vivir su reencuentro. No nos vamos a engañar, Kaos es un superficial de cuidado, el que verdaderamente atrae es Sergio, o mejor dicho, Yoyo. Para mí, Bela es el claro ejemplo de persona que te hace mejor. Y no solo eso, es ese tipo de personas que se necesitan más en el mundo. Me ha encantado, es increíble, a sus pies. Además, tenemos unos secundarios que son la leche: las madres, Dámaso, Inés y Antonia. Es una novela adictiva, pícara, con una relación amorosa muy buena, de esas que se palpa la química a kilómetros, pero sobre todo es una historia con un trasfondo brutal. Muestra una realidad a la que muchas veces le damos la espalda. Todo lo relacionado con Kenia pone los pelos de punta. No puedo evitar callarme que creo que el título no le pega nada. |