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"Te arreglaremos, Mishka. Juntaremos todos los pedazos rotos, te lo prometo. Y luego, aniquilaremos a los cabrones que te hicieron daño". Libro que me dolió hasta cada fibra, impotente y llena de ira. Pavel en esta historia no fuerza una relación, no concerta un matrimonio, no compra ninguna esposa. Simplemente nos entrometemos en el proceso de sanación de una víctima de abuso, luego de que Pavel la encuentre en una noche fría en medio de la carretera. El amor nace con una fuerza cálida, desde lo profundo de un corazón de retazos que vuelven a unirse de la protección entre los brazos de la paciencia y dedicación de otra alma que ha vivido del rechazo y el dolor del pasado. Dolorosa, cruda y paciente. Asya y Pavel son almas fracturadas que despiertan el deseo de la vida y el amor en el otro. De mis favoritas. |
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