Este libro es ensayo. Después de ese detalle, tengo que decir que el libro es sumamente interesante, contiene una cantidad de detalles y anécdotas antiquísimas sobre el comienzo de la escritura, la fabricación del papiro, sobre la gran idea de Alejandro Magno sobre su gran biblioteca y sin olvidarnos de los debates y la importancia que conlleva la escritura en sí. También nos habla del momento en el que Roma se hace con todo su imperio y la importancia que le dieron a la escritura. Las ideas y temas no están ordenados, surgen, evoluciona, se bifurcan y se retoman más adelante otra vez. La forma de estar narrada es ligera y atractiva, mezclando datos históricos con comparaciones actuales para comprender mejor la situación que quiere exponer, haciéndolo más entretenido y curioso. Pero no deja de ser un ensayo, eso quiere decir que no hay una trama al uso, no es ficción, la lectura es más consciente y lleva más tiempo. En algunos momentos también puedes llegar a saturarte. Por eso recomiendo leerla poco a poco, disfrutar de la lectura y del contenido sin prisas o agobios por el tiempo que se le dedica. Es una novela para leer despacio pero que merece mucho la pena leerla, ya no solo para comprender la importancia del papel y de la escritura, sino para conocer esa vida anterior a lo que conocemos y que damos por hecho. En definitiva, el libro es muy bueno, la lectura es interesante y atractiva, pero yo recomiendo leerlo con tranquilidad. A mí personalmente, los momentos posteriores a Ptolomeo I hasta la caída del imperio Griego me costó un poco avanzar, pero una vez que llegas a Roma, la cosa va rodada. |