 |
Decir a estas alturas que me gustan las distopías y los libros post apocalípticos os sonará a muy evidente ¿verdad? Pero es la verdad, en esta época que nos ha tocado disfrutar de esta moda, yo estoy encantada, y aun no he encontrado ninguna que me haya defraudado. Descubrir cómo se organiza la sociedad en un posible futuro (o cómo se desorganiza…) me termina siempre fascinando. La imaginación de los autores para recrear posibilidades futuras me deja con la boca abierta. El saber cómo y por qué se llega a situaciones tan terribles, cómo los autores imaginan soluciones a problemas de subsistencia y convivencia. En serio, disfruto y he disfrutado muchísimo con todas ellas. En este caso no es una excepción, Enclave sugiere un mundo post apocalíptico, al que hemos llegado después de algún tipo de holocausto y de algún tipo de epidemia que hace que existan personas viviendo debajo de tierra y Engendros. Estos son una especie de zombies que quieren comerse a los pocos humanos supervivientes que quedan. Los enclaves son pequeñas ciudades subterráneas en los que la sociedad se divide en criadores, constructores y cazadores para mantener y garantizar la supervivencia del grupo. Con una normas rígidas que nadie debe saltarse o será desterrado al exterior del enclave. Dos es cazadora, siempre quiso ser cazadora. Es fuerte, valiente y muy buena en su trabajo. Sus amigos de la infancia han sido destinados a otros trabajos. Ahora está sola con los cazadores. Y en su primera misión su compañero será Van. Van es el chico misterioso que nos va a encantar a todas, claro. Él no nació en el enclave, apareció un día por allí y como era muy bueno cazando le permitieron quedarse. Pero nunca ha sido totalmente aceptado por el grupo. Despierta muchos recelos en todos, incluida Dos. Me ha gustado muchísimo como Dos va viendo la realidad de lo que la rodea por sí misma, y no a través de lo que otros le dicen que debe ver y creer. Cómo van va dirigiéndola hacia la verdad. Y ella, cuando consigue “ver” descubre que no puede seguir sin hacer nada. Después de un par de enfrentamientos con los líderes terminan ambos siendo desterrados. Y la única salvación posible será salir al exterior, donde no se puede vivir según les han enseñado. Pero no es cierto, fuera existe un mundo totalmente diferente, pero igual de peligroso y aterrador. Además de engendros, que también los hay, están las bandas. Estas son una especie de agrupaciones de humanos que se dedican a asesinar y robar todo lo que pueden. Dos y van tendrán que sobrevivir como puedan, aprendiendo a manejarse en el exterior con los pocos recuerdos que le quedan a van de su infancia. Conocerán otra forma de sobrevivir, diferente a lo que conocían hasta ahora. Y en su búsqueda de un lugar mejor terminarán con más compañeros de viaje. Que tendrán que adaptarse o no sobrevivirán. Los sutiles cambios que experimenta todo el grupo me han parecido de lo mejor del libro. Unos creen, otros desconfían, otros encuentran fortaleza donde antes no había nada y otros aprenden a compartir y defender lo que tienen. Este grupo, ahora de cuatro (Dos, Van, Tegen y Stalker) conseguirán llegar hasta su meta final. Un lugar con personas civilizadas, con casas y con tiendas. Como antes… ¿Será todo tal y como soñaban? Eso creo que tendremos que esperar a que nos traigan Outpost para poder seguir disfrutando de esta nueva aventura. Los personajes secundarios Tegen y Stalker resultarán igual de interesantes que los protagonistas. No se les puede juzgar por cómo se comportan al principio, son producto de lo que ha sido necesario para sobrevivir, no conocen otra cosa. Y su evolución será más que interesante. Para terminar de convenceros tengo que decir que la lectura es muy rápida por que hay muchísima acción entre sus páginas, y que te leerás el libro casi sin darte ni cuenta. Para los románticos, sí, claro que hay un toquecito romántico. Pero no destaca demasiado dentro de la trama, imagino que irá a más en las siguientes entregas. Y que yo al menos no pienso perderme. Enlace: https://lecturadirecta.blogs.. |
>
