La cruz de Euge

No sabía qué me iba a encontrar cuando decidí empezar este libro de @luisadmirado, pero ha sido como cuando alguien te da “un abrazo tremendo. Sin decir una palabra”. Porque como dice en un fragmento el autor no hay “mayor muestra de personalidad que dar abrazos con silencio. Sin decir “hola”, sin dar besos”.

Te dejas llevar por una historia tan simple como original, el día a día contado con tanto talento que lo lees con una sonrisa en los labios, a veces incluso con alguna carcajada por las ocurrentes situaciones que nos relata. Los personajes son tan creíbles, que podrías pensar en que te los vas a encontrar de pronto en la máquina del café de tu propia oficina.

La novela está contada en segunda persona, una opción arriesgada, pero perfecta. Euge se vuelve real a medida que pasas las páginas, descubriéndola a través de los pensamientos del narrador, que consigue dibujarla en tu cabeza como si la tuvieras delante.

Tengo la suerte de conocer un poco al artista detrás de esta maravilla y os puedo decir que destila su personalidad en cada palabra, en cada párrafo.

No os cuento nada más. Os dejo que lo descubráis abriendo las páginas de este libro único e irrepetible y que disfrutéis de las historias de Euge, Manuel, Odille, Paqui, Teresa, el Atroz, el Mocho y otros tantos personajes que son ya inolvidables para mí. Porque “la cosa no puede ir mejor”