Sexta entrega de la saga protagonizada por Robert Hunter. Tras el final del libro anterior me quedé avida de más y por eso pase inmediatamente a leer el siguiente volumen. Sin embargo, en esta oportunidad me he encontrado con una estructura distinta a las que normalmente nos presenta el autor. Aquí el culpable es básicamente un personaje principal, y de hecho, el vínculo que lo une a Hunter hace que se le sienta sumamente cerca. Aunque tengo que admitir que no esperaba eso, Carter lo maneja de manera adecuada, nos presenta tal como dice el título "Una mente perversa". Una mente que decide irse probando a si mismo para ir escalando niveles conforme va aumentando la violencia en sus actos. Una mente que no se conforma con el "que pasaría sí". Una mente que principalmente es consciente de lo que está haciendo. Si bien es un relato escalofriante, directo, cruel y sumamente desesperante, la cuota de intriga por saber cuál iba a ser el final de esta historia me ha mantenido pegada al libro. El ritmo se torna mas rápido conforme las hojas avanzan y el final vuelve a contar con su clásica dosis de acción y aventura. Una vez más estoy gratamente sorprendida. Cómo dato: La manera en que se desglosa cierto episodio del pasado de Hunter, nos muestra al detective en su momento más vulnerable. Sin duda, solo puedo concluir colocando recomendado. + Leer más |