La feria de las vanidades de William Makepeace Thackeray
Tal vez fueron esas dos semanas las más dichosas de las vidas de ambos, aunque ellos no lo supieran. ¿Quién se percata de su propia dicha? ¿Quién puede señalar un momento como el culminante de la felicidad humana? No obstante, la pareja se sentía muy feliz y aquel viaje veraniego fue para ellos tan agradable como para cualquier otra pareja salida de Inglaterra aquel mismo año
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