![]() |
Los juegos del hambre de Suzanne Collins
- Vamos a meterte en el arroyo para que pueda lavarte y ver qué tipo de heridas tienes. - Primero, acércate un momento, que tengo que decirte una cosa. -Me inclino sobre él y acerco el oído bueno a sus labios, que me hacen cosquillas cuando susurra- Recuerda que estamos locamente enamorados, así que puedes besarme cuando quieras. - Gracias -respondo, apartando la cabeza de golpe, pero sin poder evitar reírme-. Lo tendré en cuenta. |