Obras Completas I, Lirica Personal de Sor Juana Inés de la Cruz
Esta tarde, mi bien, cuando te hablaba, como en tu rostro y tus acciones vía que con palabras no se persuadía que el corazón me vieses deseaba; y Amor, que mis intentos ayudaba, venció lo que imposible parecía: pues entre el llanto que el dolor vertía, el corazón deshecho destilaba. |