Nadie puede volar de Simonetta Agnello Hornby
Para mejorar la vida de los discapacitados, y la de nosotros, los «capacitados», y vivir juntos afrontando las dificultades —suyas y nuestras—, ante todo debemos conocernos y aprender a aceptarnos. Buenos y malos, sanos y enfermos, inteligentes y no inteligentes.
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