La piel de Sergio del Molino
En su empeño por civilizarse, la humanidad ha ido integrando a los deformes. Los monstruos han pasado de ser demonios a parecer criaturas a las que no basta con dar cariño. Hay que admirarlos porque son héroes, los Aquiles de estos días bajos en azúcar y grasas saturadas.
|