En defensa de los ociosos de Robert Louis Stevenson
Resulta irritante haber trabajado duramente escalando arduas colinas y, una vez alcanzadas, encontrar que a la humanidad le son indiferentes tus logros. De ahí que los físicos condenen lo inmaterial, los financieros apenas toleren a aquellos que saben poco de acciones, los literatos desprecien a los iletrados y la gente con un oficio se una para desacreditar a los que carecen de alguno. Pág. 13 |