Alguien que te quiera con todas tus heridas de Raphael Bob-Waksberg
Llegué a la conclusión de que tal vez intenté llevar los límites de mi universo demasiado lejos. Al fin y al cabo, vivimos en el mundo real y en el mundo real puedes pintar un arenque muerto de color morado, y puedes colgarlo en la pared, pero por mucho que lo intentes, no puedes conseguir que cante.
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