La lista de la suerte de Rachael Lippincott
Aunque las vidas de nuestras madres fueran cortas, piensa en todo lo bueno que tuvieron. La gente que las quiso, las vidas en las que dejaron huella, las aventuras que vivieron, las listas que terminaron... Tuvieron suerte, Em. Todos nosotros tenemos suerte, y no porque todo funcione, sino porque podemos levantarnos cada mañana y arriesgarnos, cometer errores e intentar no hacerlo.
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