Este libro está compuesto por tres novelas cortas: “Clarisse”, “Delphine” y “Aurore”. Está acompañado del posfacio que Marcel Proust –autor francés de renombre– y de una oda que Morand escribió para él. Primero me detendré en las novelas y luego en el material que las rodea. Clarisse, Delphine y Aurore son tres mujeres que se involucran con un mismo personaje-narrador –no hay indicios de que sean más de uno– en la ciudad de Londres, en plena Primera Guerra Mundial. Ni las circunstancias ni los ánimos son los mejores y la narración de repente nos arrastra y nos sitúa en ese contexto. Las mujeres mencionadas son el alma de cada una de las novelas, a pesar de que el protagonista aporte lo suyo. Al principio a ellas las veía como acompañantes hasta que, desde mi punto de vista, él empezó a asumir ese rol. Clarisse y sus manías por los objetos, Delphine y su tristeza y Aurore y su vivacidad son lo suficientemente fuertes como para tomar las riendas de las historias. La escritura de Morand –tanto en las novelas como en la oda– es exquisita y contundente, dos adjetivos que no suelen ir de la mano. Creo que se destaca muchísimo cuando el narrador se refiere a Londres y a la ambientación histórica. No necesita describir todo con detalles y sabe resaltar siempre las personalidades y las peculiaridades de las mujeres. Las relaciones, en los tres casos, son algo tormentosas e incluso violentas. En cuanto al posfacio de Proust, me quedé un poco descolocada ante su lectura, a pesar de las advertencias de la nota que lo presenta. Lo de Proust es más un ensayo sobre literatura francesa que un texto sobre “Tendres Stocks”. De hecho, casi ni lo menciona. Es muy interesante de leer pero, si se está buscando una breve presentación de la obra de Morand, no cumple su función. La edición de Leteo está muy bien documentada y trata de darle una explicación a ese –¿Ninguneo? ¿Olvido? ¿Venganza? – extraño comportamiento de Proust. En definitiva, Morand es un autor que hubiera deseado conocer antes, pero creo que llegó en el momento justo porque me alivió mucho leerlo. + Leer más |