Libre de Patrick Ness
-Te amo -dijo Adam. Se lo dijo a Linus. Linus le guiñó el ojo con gesto travieso. -Decirlo durante el sexo no cuenta -pero entonces notó las lágrimas en los ojos de Adam y, con dulzura, se las enjuagó-. ¿Adam? -No me dejes sin haberme amado -respondió Adam y, abrumado de vergüenza, lloró un poco más. |