Las voladoras de Mónica Ojeda Franco
Entonces sus manos empezaron a temblar y los temblores le recordaron que el mundo era un sitio horrible donde abandonar el cuerpo.
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Las voladoras de Mónica Ojeda Franco
Entonces sus manos empezaron a temblar y los temblores le recordaron que el mundo era un sitio horrible donde abandonar el cuerpo.
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