Poesía completa de María Mercedes Carranza
Tengo miedo Todo desaparece ante el miedo. El miedo. Cesonia; ese bello sentimiento, sin aleación, puro y desinteresado; uno de los pocos que saca su nobleza del vientre. ALBERT CAMUS, Calígula. Miradme: en mí habla el miedo. Tras estos ojos serenos, en este cuerpo que ama: el miedo. El miedo al amanecer porque inevitable el sol saldrá y he de verlo, cuando atardece porque puede no salir mañana. Vigilo los ruidos misteriosos de esta casa que se derrumba, ya los fantasmas, las sombras me cercan y tengo miedo. Procuro dormir con la luz encendida y me hago como puedo a lanzas, corazas, ilusiones. Pero basta quizás solo una mancha en el mantel para que de nuevo se adueñe de mí el espanto. Nada me calma ni sosiega: ni esta palabra inútil, ni esta pasión de amor, ni el espejo donde veo ya mi rostro muerto. Oídme bien, lo digo a gritos: tengo miedo. |