Una jaula en un jardín de verano de Margaret Drabble
- Siempre imaginé que serías catedrática – dijo Louise. - Eso creía yo. Pero te diré cuál es el problema. El sexo. No puedes ser una catedrática sexi. Los hombres puefen ser cultos y atractivos, pero no las mujeres. Desvirtúa la seriedad incuestionable del cargo. Está muy bien sentarse en una gran biblioteca y rezumar sexo y alterar a todo el mundo cada vez que que el vestido se desliza por tu hombre desnudo, pero no puedes ganarte la vida así. Enseguida tendrás que disimularlo e vez de realzarlo si pretendes llegar a lo más alto; y, cuando solo tienes una vida, parece una lástima. |