El país más feliz del mundo de Macarena Vidal
El ring ring retumba de nuevo en nuestras almohadas. Descolgamos el auricular, aún desorientadas, y una voz áspera de hombre nos dice que debemos estar en el vest´bulo en quince minutos para ir a « una actividad » . Sin darnos tiempo a responder la llamada se corta.
|