Todos somos villanos de M.L. RIO
Es extraordinario cómo el teatro…puede insensibilizarnos frente al espectáculo de la violencia. Pero no es solo un truco escénico. Cuando a Macbeth le cortan la cabeza o le cortan la lengua a Lavinia o los conspiradores bañan sus manos en la sangre de César, debería afectaros, seáis la víctima, el agresor o solo un testigo. ¿Habéis visto alguna vez una pelea de verdad? Es horrible. Es visceral. Y lo más importante, es emocional
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