Cuerpos malditos de Lucía Baskaran
Eran "cosas de niños", y las cosas de niños eran ajenas a los adultos, que sólo intervenían para pegarnos un grito si molestábamos demasiado. Los adultos nos daban a entender que los niños no sentíamos dolor, o que si lo sentíamos eran naderías comparadas con el suyo.
|