El diablo en primavera de Lisa Kleypas
(…) Son criaturas peligrosas las florero… Hay que aproximarse a ellas con la máxima cautela. Se quedan silenciosas en los rincones, pareciendo abandonadas y tristes, cuando en realidad son sirenas que hacen caer a los hombres. Ni siquiera te darás cuenta de en qué momento te arranca el corazón. Y una florero no te lo devuelve nunca.
|