El reino de los malditos de Kerri Maniscalco
-Tienes que irte de aquí. Ahora mismo. -¿Por qué? -Porque te estás arrancando la ropa y me miras como si la mía fuera la siguiente. (...) -¿No quieres verme desnuda? -Ya lo he hecho. -¿Y? -Si cuando lleguemos a casa todavía quieres arrancarte la ropa, podemos discutirlo entonces. |