Caen estrellas fugaces de José Gil Romero
Hay hombres buenos y hombres malvados. No hace falta recurrir a demonios para explicar los actos terribles de algunas personas
|
Caen estrellas fugaces de José Gil Romero
Hay hombres buenos y hombres malvados. No hace falta recurrir a demonios para explicar los actos terribles de algunas personas
|