Masa de Joost Vandecasteele
Tenemos que creer en la economía de mercado, porque la alternativa ateísta conduce a la destrucción total. De hecho, la humanidad ya realiza intercambios comerciales basados en datos ficticios. Como la ilusión de que Alemania es fiable, mientras que toda su maquinaria económica se mantiene en pie a base de trabajadores mal pagados y desprotegidos y buenas relaciones públicas.
|