Mil veces hasta siempre de John Green
Le habría dicho que Davis y yo no hablábamos mucho, ni siquiera nos mirábamos mucho, pero no importaba porque contemplábamos juntos el mismo cielo, y quizás eso es mucho más íntimo que el contacto visual. Cualquiera puede mirarte. Pero muy pocas veces encuentras a alguien que ve el mismo mundo que estás viendo tú.
|