Nuncanoche de Jay Kristoff
La embargó un escalofrío. No por la idea de morir, ojo, porque en realidad ningún niño se cree menos que inmortal.
|
Nuncanoche de Jay Kristoff
La embargó un escalofrío. No por la idea de morir, ojo, porque en realidad ningún niño se cree menos que inmortal.
|