La chica de nieve de Javier Castillo
Quizá estaba buscando en su memoria cuándo se había portado mal para merecer lo que les había sucedido, pero yo estaba segura de que la vida no funcionaba así, porque siempre repartía palos entre las ruedas a todo al que alcanzaba. Yo ya sabía que si la vida descubre que no tiene cómo ponerte la zancadilla te regala una bicicleta sin frenos para destrozarte los huesos.
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