Las pruebas de James Dashner
—Oh, muchacho, eres un mamón con suerte, me gustas. No estoy seguro de por qué, pero es así. De lo contrario, ya te hubiera matado tres veces. —¿Se puede hacer eso?—preguntó Thomas. —¿Eh —Matar a alguien tres veces. —Ya habría encontrado la manera. —Entonces, intentaré ser más simpático. |