Libro de las canciones de Heinrich Heine
¿Por qué se agita así mi sangre airada? ¿Por qué me arde violento el corazón? La sangre se me hierve, exasperada, y el pecho se me abrasa de furor. Mi enardecida sangre hierve y bulle porque volví a soñar el sueño aciago: el hijo de la noche vino, lúgubre, y, resollando, me llevó en sus brazos. |