Los Buenos de Hannah Kent
Qué recóndito el corazón -pensó Nance-. Que miedo nos da que nos conozcan y, sin embargo, con cuanta desesperación lo anhelamos.
|
Los Buenos de Hannah Kent
Qué recóndito el corazón -pensó Nance-. Que miedo nos da que nos conozcan y, sin embargo, con cuanta desesperación lo anhelamos.
|