El día que sientas el latir de las estrellas de Dulcinea (Paola Calasanz)
Porque una vez sientes su latido, llamándote, agarrándote a la vida, a la naturaleza, ya nada vuelve a ser lo mismo. Ya no puedes ser el que eras ni volver de donde viniste. Una vez te conectas a la vida de verdad, a lo que realmente importa, todo cambia. Y eso es imparable, indomable e inevitable.
|