Una vieja Cámara de Cristina Gracia Tenas
- Pero, hijo, ¿cómo has podido caer tan bajo,? - ¿Acaso no lo sabes? ¡Por la puta de Mar! Si no me hubiera abandonado, yo no habría acabado así. |
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Una vieja Cámara de Cristina Gracia Tenas
- Pero, hijo, ¿cómo has podido caer tan bajo,? - ¿Acaso no lo sabes? ¡Por la puta de Mar! Si no me hubiera abandonado, yo no habría acabado así. |
Así lo viví... Así os lo cuento de Cristina Gracia Tenas
Te debía de importar muy poco que lo pudieran heredar nuestros hijos, a eso de le llama crueldad. - Te equivocas, no me siento orgullosa por habéroslo ocultado, pero no quise traspasaros mis angustias y mis miedos. Teníais todo el derecho del mundo a ser madres, coss a la que yo me negué, a pesar de que los médicos me dijeron que solo había un veinte por ciento de posibilidades, de que a veces esa posibilidad no se da entre madres e hijos, que puede traspasar generaciones e incluso no llegar a darse nunca. |
Una vieja Cámara de Cristina Gracia Tenas
¿Es usted consciente de que si no hace a pies de juntillas lo que acabo de decir morirá dentro de poco? Su cuerpo no admite ni un gramo más de alcohol. Es usted joven. Ponga rumbo a su vida. Necesitará ayuda y mucha fuerza de voluntad. Yo ya le doy el alta. Espero que no tengamos que vernos en un futuro próximo. Le aconsejo que se dirija a Alcohólicos Anónimos. Allí le pueden ayudar y, si es posible, no viva solo mientras no esté recuperado. Haga que alguien se responsabilice de usted.
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Una vieja Cámara de Cristina Gracia Tenas
Pero si el concepto que tienes del matrimonio es que uno chilla y el otro ataca, vamos dadas. Una pareja es la unión de dos personas que van a una, a pesar de que las mujeres seguimos siendo las que llevamos la carga más importante y de que eso no es equitativo. Vamos progresando muy lentamente, pero lo vamos haciendo. Acuérdate de los problemas que tuvo tu madre para encontrar trabajo por el dichoso permiso marital. Ahora podéis trabajar y ser independientes...
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Una vieja Cámara de Cristina Gracia Tenas
- Mar, mírame. Sabes que se puede empezar de nuevo y no es ninguna desgracia. Además, me tienes aquí. No sigas mi patrón. No esperes a que sea demasiado tarde.
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Una vieja Cámara de Cristina Gracia Tenas
- Para hacer magisterio no tendrías que haber pasado por el COU- le dijo Natalia meneando la cabeza -. Vaya pérdida de tiempo y esfuerzo. Las diplomaturas no necesitan ese paso previo. Ya estarías haciendo segundo. Mar no le contestó. ¿Para qué le iba a explicar que sería algo rápido y que no quería que se gastarán ni un duro más con ella ?.¿Para que decirle que se sentía mal y a veces incluso un parásito de la sociedad ? |
Así lo viví... Así os lo cuento de Cristina Gracia Tenas
- ....¿cómo no te decidiste? - Pues porque yo sí que heredé la enfermedad. -¿Cómo dices? - Lo que has oído. Mucho más leve que mamá, por suerte. Las medicinas han cambiado, los controles y las terapias. La llevo más o menos bien, con mis altibajos, mis subidas y mis bajadas. Tomeu es un puntal para mí, detecta mis cambios antes de que yo sea consciente. |
Una vieja Cámara de Cristina Gracia Tenas
Algunas estaban tomadas desde lejos, otras desde muy cerca. No entendía cómo de esas últimas no se había dado ni cuenta. Al mirarlas, los ojos se le inundaron de lágrimas. Se vio vieja, empequeñecida, derrotada, humillada.Sobre todo lo que más le dolió fue ver sus ojos. Tenían una mezcla de tristeza y de terror que no dejaban indiferente.
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Así lo viví... Así os lo cuento de Cristina Gracia Tenas
Es verdad que con el paso del tiempo las cosas han cambiado mucho. Antes la palabra de un profesor iba a misa, ahora se nos cuestiona por cualquier cosa y tenemos que andar con pies de plomo. Sobre todo con los padres, se creen con derecho a todo. Pones un castigo y si te descuidas acabas pidiendo perdón.
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Así lo viví... Así os lo cuento de Cristina Gracia Tenas
Pensé en lo diferentes que eran, parecía que formarán dos equipos. Rhoda no paraba de hacer fotos con su móvil y Anthes estaba encantada con el paseo, continuamente me iba preguntando cosas. Por el contrario las gemelas solo tenían ojos para la innumerable cantidad de tiendas que había en el recorrido.
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Los nombres de personajes en un libro aparecen: