El aliento de los dioses de Brandon Sanderson
Se sentía entusiasmado. Jubiloso. Aquello era algo que ningún dios hacía. Merodear de noche, recorrer túneles ocultos, buscar pistas y secretos. Qué extraño- pensó-. Nos dan todo lo que creen que podemos querer: nos atiborran de sensaciones y experiencias. Y, sin embargo, los sentimientos reales, miedo, ansiedad, emoción, nos son completamente ajenos.
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