La conquista de la felicidad de Bertrand Russell
Nada es tan triste como encerrarse dentro de sí mismo; nada tan exultante como dirigir la atención y la energía al exterior.
|
La conquista de la felicidad de Bertrand Russell
Nada es tan triste como encerrarse dentro de sí mismo; nada tan exultante como dirigir la atención y la energía al exterior.
|