El valle de Bernard Minier
Sí, el orgullo es el primero de todos los pecados, pues no puede existir ningún pecado que no implique o presuponga orgullo
|
El valle de Bernard Minier
Sí, el orgullo es el primero de todos los pecados, pues no puede existir ningún pecado que no implique o presuponga orgullo
|